sábado, 23 de agosto de 2008

Don Quijote

El famoso hidalgo de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor, como lo definió su creador Miguel de Cervantes Saavedra hace 400 años ha tenido un sinnúmero de representaciones y ha sido ejemplo para infinitas actividades humanas en todo el mundo. Su literalmente quijotesca arremetida contra los molinos es ahora el modelo para un sistema de protección de la Tierra contra NEAs que está siendo desarrollado por la Agencia Espacial Europea (ESA).

Don Quijote es una sonda experimental que deberá impactar contra un asteroide y causarle un desvío. Como en el caso de la Fundación B612 , esta sonda busca demostrar que el concepto de desvío por colisión es factible, ganar experiencia, desarrollar técnicas y conocer sus problemas.


Don Quijote (DQ) estará formado por dos módulos, cuyos nombres no pueden ser otros que Sancho Panza e Hidalgo. Este segundo es el misil que impactará sobre el asteroide. Para conocer con precisión la órbita previa y el momento preciso para realizar la operación así como los efectos de la misma, se usará a Sancho.




Representación de la colisión de Hidalgo contra un asteroide. Sancho, mientras tanto, observa los detalles. (Fuente: ESA)


Hidalgo pesará unos 500 Kg, mientras que la carga de combustible será de poco más de una tonelada ya que su trayectoria será balística, o sea, aquella que sigue un objeto cuando es lanzado sin propulsión. Su sistema de navegación tendrá una precisión de 50 m. La mayor parte de su vida útil estará "durmiendo", hasta que reciba la señal de lanzarse sobre su obejtivo al que chocará con una velocidad relativa de 9 km/s.

Sancho, por el contrario, realizará un largo viaje de exploración que durará casi cuatro años, dando tres vueltas en torno del Sol, estudiando al asteroide que será blanco de Hidalgo; y dejando caer un módulo de análisis llamado ASP-DEX o Autonomous Surface Deployment Engineering eXperiment (Experimento Autónomo de Ingeniería para Posarse sobre la Superficie) cuya importancia es crucial para revelar el éxito del experimento y también para conocer con mejores detalles la superficie de un NEA, lo que permitirá planear misiones de otro tipo. Una animación del funcionamiento de un sistema tipo DQ puede verse en el siguiente link.

Don Quijote plantea una solución diametralmente opuesta a la sugerida por la Fundación B612, ya que pretende modificar el curso del asteroide por medio de un único golpe perfectamente calculado que sería capaz de desequilibrarlo suficientemente como para evitar su colisión con la Tierra. Sobre ambas metodologías nos referiremos en una próxima entrada.

Sería bueno, por otra parte, que el Don Quijote espacial tenga más éxito que su ilustre mentor cuando intentó derribar a los gigantes...